domingo, 25 de julio de 2010

Kirchner presenta nuevas pruebas incriminatorias contra Macri

BUENOS AIRES (Télam) - El ex-Presidente de la Nación, Néstor Kirchner, ha aportado nuevas pruebas ante la Cámara Penal que involucran al Jefe de Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires, Mauricio Macri, en escuchas telefónicas ilegales.

Los aparatos telefónicos supuestamente interceptados por Macri fueron una de las nuevas pruebas presentadas. Según Kirchner, “Los agujeros a la altura del auricular prueban que hubo pinchaduras”. El actual Diputado también acusó a Macri de ser el responsable directo del derrame petrolero en el Golfo de México. “Fue Macri el que pinchó la plataforma submarina de British Petroleum”. Cuestionado sobre cómo pudo Macri sumergirse a 1.600 metros en el océano para perpetrar el atentado, Kirchner no titubeó en afirmar que “todos sabemos que Macri, como su carrera política, está bajo el agua hace rato”. El titular de la Unasur resaltó asimismo que "este señor no es consciente del daño que causan sus acciones. Por lo que estuve leyendo, su atentado terrorista va a generar un desastre ecológico en Florida, que seguramente se extenderá a las arterias aledañas del microcentro porteño".

Macri, por su parte, ha preferido no responder a la denuncia, centrando su defensa pública en demostrar su esfuerzo y compromiso con la calidad de las escuchas ilegales. Macri manifestó que “Como nos pasa a todos cuando nos vemos en un video, algo que descubrimos con las pinchaduras es que las voces grabadas se escuchan más agudas que lo que realmente son”. Para ilustrar el problema, Macri comentó que “hace un tiempo captamos una voz que no podíamos identificar con claridad. Tuvimos que contratar a expertos estadounidenses que trabajaron durante seis meses para revelar que la persona grabada no era, como pensábamos nosotros, el pibe Buonanotte de River, sino el mismísimo Aníbal Fernández”.

Consultado sobre el político opositor más complicado para escuchar, Macri señaló a Julio Cobos. “Cobos siempre fue un dolor de cabeza, porque la mayor parte del tiempo no habla, y cuando habla, no dice nada”.